En el exterior de la ciudad, en campo abierto, está la Cripta del Peccato Originale, recientemente restaurada, con un extraordinario ciclo pictórico de frescos que cubren las paredes de la izquierda y del fondo. Por último, el Convento di Sant'Agostino, monumento nacional italiano, está situado en el barrio Sasso Barisano y se erigió en 1593, junto con la iglesia homónima, sobre la antigua cripta rupestre de San Giuliano que se remonta al siglo xii (a veces descrita como cripta de San Guglielmo a causa de un error histórico).